El tiempo pasa, y cuando el año va tocando a su fin, una de las mayores operaciones no solo del 2025, sino del transporte terrestre en Europa, continua su camino. DSV avanza en el refuerzo de su posicionamiento a nivel mundial, y en el mercado español, este posicionamiento se está realizando combinando inversión tecnológica y una profunda reorganización corporativa, tras culminar la integración de Schenker a nivel global. Como ya anunciamos en informacionlogistica.com, hace pocos meses que DSV tomo el control de Schenker en España como continuación de route map que la compañía danesa tiene.
DSV ha cerrado 2025 en España con dos movimientos estratégicos que impactan directamente en su actividad logística: la puesta en marcha de un nuevo almacén semiautomático para la Armada Española y la absorción operativa del negocio de Schenker dentro de su estructura nacional.
Por un lado, DSV ha completado la implantación de una solución logística semiautomatizada en el Arsenal de Cartagena, destinada a optimizar la gestión de repuestos y suministros de los buques y unidades navales de la Armada Española. El proyecto incorpora un almacén de palets de pasillo estrecho con sistemas de posicionamiento automático y capacidad para más de 1.600 palets, junto a una solución tipo mini-load preparada para cerca de 4.000 cajas de distintos formatos. Todo el sistema se integra mediante un SGA desarrollado específicamente para garantizar la interoperabilidad con las plataformas logísticas ya existentes en el ámbito de defensa.
Esta infraestructura supone un paso adelante en la modernización de la logística militar, aportando mayor precisión en el control de inventarios, reducción de tiempos en la preparación de pedidos y una mejora sustancial en la trazabilidad de los materiales críticos. La iniciativa, además de reflejar el papel creciente de la automatización como palanca de eficiencia en entornos logísticos de alta exigencia operativa, muesra el potencial de DSV, en quien una institución como la Armada española ha depositado una parte de su logística, crítica al hablar de repuestos y suministros.
En paralelo, DSV ha avanzado en la reorganización de su presencia corporativa en España tras completar la adquisición global de Schenker. A finales de 2025 se materializó la disolución de Schenker Logistics como entidad independiente en el país, redistribuyendo sus actividades entre las distintas divisiones de DSV: DSV Air & Sea, DSV Road Spain y DSV Solutions Spain. El proceso se ha llevado a cabo mediante una sucesión de patrimonio sin liquidación, permitiendo una integración directa de los activos, contratos y operaciones.
Esta reordenación es la consecuencia directa del cierre definitivo de la operación de compra de Schenker, formalizada el 30 de abril de 2025 tras superar todas las autorizaciones regulatorias. La transacción, valorada en más de 14.000 millones de euros, ha dado lugar a uno de los mayores grupos logísticos del mundo, con presencia en más de 90 países y una plantilla global de decenas de miles de empleados, y posiblemente, el mayor competidor de transporte.
En el mercado español, los efectos de esta integración ya se reflejan en la gestión diaria del transporte y el almacenaje, que pasan a operar bajo las marcas y estructuras de DSV, donde se han integrado o están en la fase final del mismo los integrantes de la antigua Schenker. En el segmento de transporte terrestre, el impacto legal completo de la reorganización está previsto para comienzos de 2026, culminando así el proceso de absorción, por lo que el servicio será comercializado ya únicamente bajo la enseña de DSV.
Con estas actuaciones, DSV consolida su estrategia basada en escala con la compra e integración de otros operadores, y la aplicación de la tecnología. Quedará por ver en el 2026 si toda esta integración es percibida por el mercado y por sus clientes como algo positivo, o por contra, el plano operativo dará más de un dolor de cabeza hasta su plena integración.
Carlos Zubialde
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