El grupo de empresas AP Moller.Maersk, dueño de Maersk Line, la principal compañía mundial de transporte marítimo de mercancías, gano 11.848 millones de dólares (10.189 millones de euros al cambio) en los primeros 9 meses del año 2021. Estos beneficios suponen un incremento espectacular si se compara con los primeros 9 meses del 2020, donde ganaron 1551 millones de dólares (1333 millones de euros)

La situación mundial de las cadenas de suministro están haciendo que los precios del transporte marítimo se hayan duplicado por 6, tanto que del beneficio obtenido por Maersk Line, casi la mitad (5438 millones de dólares/4676 millones de euros al cambio) corresponde solamente al tercer trimestre del 2021, frente a los 927 millones de dólares/797 millones de euros que tuvo de beneficio en el año 2020. La facturación de la compañía aumento un 52% en los primeros 9 meses, llegando hasta los 43281 millones de dólares (37220 millones de euros).

El 84% del incremento de facturación de Maersk Line viene de su división de marítimo, un 37.5% del negocio de la logística y un 23.5% del área de terminales. Según la dirección de la compañía danesa, la excepcional situación del mercado del transporte marítimo, con una demanda totalmente alocada sobre todo por parte de países como los estados unidos está tirando hacia arriba los ingresos y los beneficios.

Pero la voracidad de los daneses no se centra solo en el transporte marítimo, y en afianzar su posición de liderazgo en el mismo, sino que se lanzan de forma más robusta hacia el negocio del transporte de carga aérea, con la compra de la plataforma de transporte de origen alemán Senator International por 554 millones de euros con el objetivo de reforzar su capacidad de carga y expandir su red aérea global. Además, comprará dos nuevos Boeing B777F y alquilará otros tres aviones de carga B767-300, que serán gestionados su filial que gestiona las operaciones de carga aérea de Maersk.

Como se puede observar, teniendo el poder y mando sobre el transporte de mercancías vía marítima, pudiendo “manipular” sus precios de fletes en función de sus intereses, Maersk Line no deja de poner el ojo en otra línea de negocio tanto o más lucrativa como lo es la carga aérea.

Artículo propiedad de Carlos Zubialde

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