El sector del transporte y la logística en España ha experimentado una leve pero significativa reducción en los plazos de pago a los transportistas durante el mes de julio de este año. Esta tendencia, aunque modesta, marca un avance hacia la mejora de las condiciones financieras para los profesionales de la carretera, quienes han enfrentado históricamente desafíos relacionados con la morosidad en los pagos, algo por desgracia muy habitual en España.

El cumplimiento de los plazos de pago es un indicador clave de la salud financiera del sector. Durante julio, el plazo medio de pago a los transportistas se situó en 64 días, una leve reducción respecto al mes anterior. Este dato refleja una tendencia positiva en la que las empresas están comenzando a acortar los tiempos de liquidación de sus deudas con los transportistas, un movimiento crucial para la estabilidad y sostenibilidad del sector, aunque en el fondo suponga que no se cumple con la ley de pagos.

Incumplimientos y su impacto

A pesar de esta mejora, primero debemos de señalar que estaríamos fuera del plazo máximo establecido por la ley. Señalar igualmente que todavía se observa que más de la mitad de las empresas cargadoras e intermediarias incumplen los plazos máximos establecidos por la legislación. Específicamente, el 53% de las empresas no respetaron los plazos de pago durante julio. Sin embargo, es relevante destacar que en el 75% de los casos, estos incumplimientos fueron "leves", con plazos que oscilaron entre los 60 y 90 días. Este tipo de morosidad, aunque no ideal, muestra una mejoría en comparación con periodos anteriores, donde los retrasos eran significativamente más largos.

La morosidad severa, caracterizada por plazos de pago que superan los 120 días, también mostró una disminución. En julio, solo el 9% de las empresas incurrieron en este tipo de incumplimientos, un porcentaje menor comparado con el 11% del mes anterior y notablemente inferior a los niveles observados en 2022, cuando más del 20% de las empresas se encontraban en esta franja de incumplimiento.

En cuanto a los medios de pago utilizados en el sector, la transferencia bancaria sigue siendo el método predominante, representando el 72% de los pagos realizados. Le siguen es el confirming con un 25%, el pagaré con un 3%, y el cheque, que representa menos del 1%. Estos datos reflejan una preferencia por métodos de pago más seguros y trazables, que son cruciales para mantener la confianza y la liquidez.

Queda finalmente por conocer cuando será el primer mes donde se cumpla la media del pago por debajo del plazo máximo establecido por la ley de pagos, que recordemos, es de 30 días desde la realización del servicio, con un plazo máximo de 60 días mediante acuerdo entre las partes.

Carlos Zubialde

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