Continúa el culebrón de la venta de DB Schenker, y los últimos en alzar su voz han sido los sindicatos, entre los cuales Verdi, el principal en la compañía, ha informado que prefieren que la venta sea al fondo CVC Capital en lugar de a DSV. Esta declaración se hace a pocos días supuestamente de la decisión que tomará DB muy próximamente, según han estado informando distintas fuentes.
Durante el recorrido de la venta se han vinculado a muchas empresas en el interés de hacerse con DB Schenker, desde UPS, DHL, Maerks, aunque es DSV la única que ha mantenido desde el principio su interés, al que se unió el fondo de inversión CVC Capital, que será finalmente uno de ellos quien se lleve el gato al agua.
El motivo por el cual el principal sindicato se postula por un fondo de inversión en lugar de por una empresa consolidada es únicamente por el impacto que puede tener la venta en el mantenimiento de los empleos actuales en DB Schenker. El sindicato ha informado que según sus cálculos, en el caso de que Schenker fuera integrada dentro de DSV, cerca de 5300 puestos de trabajo quedarían eliminados si se compara con la propuesta del fondo de inversiones.
Donde están las diferencias
Las principales diferencias que este sindicato enumera se centra primero en que muchas de las divisiones de Schenker y DSV quedarían solapadas, por lo que de esa unión habría un proceso de "optimización" de recursos, suponiendo que los más afectados serán los trabajadores de la compañía alemana.
Además de esto, DSV tendría la idea de repartir DB Schenker entre 3 compañías del grupo, cuestión que este sindicato ve como un potencial peligro que aumenta el riesgo de despidos, cuestión que no ocurriría si es CVC la que adquiere DB Schenker, ya que continuaría operando como una única empresa, aunque su propuesta de compra tiene una fuerte vinculación en los beneficios futuros, lo que a la larga también puede suponer un ajuste de personal.
Aún no hay fecha exacta para la toma de la decisión final, pero se cree que puede ser durante las próximas semanas. Sea como sea y siendo cualquiera de los dos postulantes, lo único cierto es que el sector del transporte en Europa sigue un camino de concentración que puede terminar por cambiar el sector en los próximos años.