La STB revisará la solicitud de Norfolk Southern para controlar la línea ferroviaria Norfolk & Portsmouth Belt Line
La Junta de Transporte de Superficie examina la controvertida solicitud de Norfolk Southern para controlar la línea ferroviaria NPBL en medio de una disputa legal.

La Junta de Transporte de Superficie (STB) ha decidido examinar más de cerca la propuesta de Norfolk Southern para asumir el control oficial de la línea ferroviaria Norfolk & Portsmouth Belt Line (NPBL) en Virginia. Esta decisión surge en medio de una larga disputa legal que enfrenta a CSX y Norfolk Southern, que se ha prolongado por seis años.
Norfolk Southern ha mantenido el control del NPBL, que abarca 36 millas, desde 1982 gracias a su participación del 57%. CSX, que posee el 43% restante, argumenta que debería tener acceso directo al Terminal Internacional de Norfolk a través del NPBL, que llega al terminal portuario utilizando las vías de Norfolk Southern. CSX ha expresado que la tarifa de conmutación impuesta por NS y NPBL, que asciende a $210 por carro, dificulta su capacidad de competir en el terminal de Norfolk.
La controversia se intensificó tras un caso antimonopolio iniciado por CSX en 2018, el cual reveló en 2022 que los reguladores nunca autorizaron el control de NPBL por parte de Norfolk Southern en 1982. Consecuentemente, la STB ordenó a Norfolk Southern presentar oficialmente su solicitud para este control. El mes pasado, NS intentó obtener la aprobación regulatoria bajo la clasificación de "transacción menor", argumentando que no afectaría la competencia. Sin embargo, CSX discrepó y solicitó que la transacción fuera considerada significativa debido a las preocupaciones sobre el acceso al terminal.
En una reciente decisión, la STB concluyó que el caso NPBL es, de hecho, una transacción significativa que requiere una revisión más exhaustiva. La junta destacó que no podía determinar, basándose en la información actual, que la transacción no tendría efectos anticompetitivos.
La Autoridad Portuaria de Virginia hizo un llamado a la STB para que el caso se revisara con mayor detenimiento, argumentando que tanto Virginia como sus clientes se beneficiarían de un análisis completo del control del NPBL por parte de Norfolk Southern. Además, CMA CGM, un cliente de CSX, expresó su preocupación por la afirmación de Norfolk Southern de que la transacción no tendría efectos anticompetitivos, enfatizando la necesidad de competencia ferroviaria en los terminales que utilizan.