No se puede negar que sectores como el transporte o la logística no sean dinámicos y que las empresas se encuentran en una constante búsqueda de mejoras operativas que les permita no solo mantenerse competitivas, sino también destacar en un entorno cada vez más exigente. En este contexto, la tecnología se está convirtiendo en un aliado estratégico para enfrentar los retos actuales y, en particular, para lograr una significativa reducción de costes a través de la optimización de procesos (aumentar el número de operaciones con una mayor eficiencia es un objetivo fundamental).
Las empresas logísticas enfrentan diversos desafíos en su día a día, desde la complejidad en la planificación de rutas hasta la necesidad de maximizar la eficiencia operativa, todo ello combinado con el ofrecimiento de un servicio de máxima calidad ante un cliente como decíamos anteriormente, cada vez más exigente, y que precisa estar informado de forma completa con respecto a su operación de transporte, por ejemplo.
En este escenario, la reducción de costes en el reparto emerge como una prioridad fundamental, y la tecnología se erige como un facilitador clave para alcanzar este objetivo. La transformación digital de las empresas logísticas y de transporte está actuando como un verdadero catalizador de la mejora de la eficiencia operativa, cuya consecuencia es el ahorro de costes, como por ejemplo en:
La búsqueda de soluciones efectivas
Sin duda, la digitalización de los procesos logísticos se presenta como un paso clave. La implementación de tecnologías avanzadas como la Inteligencia Artificial no solo optimiza la planificación de rutas, sino que también impacta directamente en métricas clave, generando ahorros significativos en tiempo, personal y costes operativos.
Ahorro de tiempo: revolucionando la planificación de rutas
Una de las métricas más impactantes es el ahorro de tiempo en la planificación de rutas. Tecnologías avanzadas, como los sistemas de gestión de rutas, pueden reducir hasta un 80% el tiempo dedicado a esta tarea. Esto no solo mejora la eficiencia, sino que también libera recursos valiosos para que el equipo de operaciones/tráfico se enfoque en actividades de mayor valor para la compañía. Este nuevo enfoque genera no solo el ahorro de tiempo, que significa ahorro de costes, también genera una mayor identificación profesional para los profesionales de estas áreas.
Optimización de personal: redefiniendo roles para mayor aportación
La pregunta clave es: ¿Cómo puede el equipo aprovechar el tiempo ahorrado de la planificación de rutas? La respuesta radica en la redefinición de roles. La digitalización permite que el personal se concentre en tareas estratégicas y de valor añadido como habíamos señalado en el punto anterior, contribuyendo así al crecimiento y la innovación de la compañía.
Otro resultado de esta redefinición es la generación de un entorno más profesional, que influye en una reducción de la rotación del personal, reteniendo el talento en las compañías, que es uno de los problemas más acuciantes para el sector en los próximos años.
Reducción de costes: kilómetros ahorrados, combustible optimizado
La eficiencia en la planificación de rutas no solo implica un ahorro de tiempo, sino también una reducción significativa en los kilómetros recorridos. Posiblemente, este sea el primer ahorro o el más visible para el sector, ya que su medición es muy sencilla de hacer y comparar.
Este ahorro se traduce directamente en una disminución de los costes operativos, especialmente en términos de combustible. La implementación de tecnología especializada en el control y gestión de envíos permite que las empresas logísticas puedan experimentar ahorros que oscilan entre el 10% y el 25%, dependiendo de su operativa y características específicas.
Tampoco debemos de olvidar que menos kilómetros supone un menor desgaste de nuestra flota de distribución, que es otro ahorro inmediato y directo de una buena planificación de la distribución.
Crecimiento sostenible: reparto eficiente para más volumen y clientes
La eficiencia operativa no solo se traduce en ahorros, sino que también facilita el crecimiento sostenible de las empresas logísticas. Un reparto más eficiente permite asumir mayores volúmenes de carga y atender a más clientes sin comprometer la calidad del servicio. La eficiencia alcanzada nos permite poder aumentar las cargas de trabajo por unidad de reparto, no solo con un mayor número de direcciones de entrega, sino también por la combinación de clientes, permitiendo un mayor volumen de entregas en un mismo punto de destino, que reciben mercancías de distintos clientes y orígenes.
Pero estas mejoras, para que sean efectivas, deben de contar con una información actualizada al minuto de las operaciones, con un traslado de información inmediato entre la fuerza de distribución, operador logístico y cliente. Compañías como Logístiko ponen a disposición de operadores logísticos como Servicio Móvil, Fedefarma o Drivervan opciones de gestión que permiten digitalizar completamente las rutas y toda la documentación asociada, ahorrando tiempo de planificación, toneladas de CO2 y papel en las gestiones de albarán, informes de rendimiento y otros.
Conclusiones: hacia un futuro logístico más eficiente
Viajamos hacia un futuro logístico más eficiente, no solo por exigencias del mercado, sino también por la propia necesidad de mantenimiento de los márgenes en el sector.
La transformación digital no solo es una necesidad, es una oportunidad para lograr una reducción significativa de costes en operaciones como la planificación de rutas, la optimización del tiempo de trabajo del personal, la reducción de costes operativos y el crecimiento sostenible. La inversión en la digitalización de procesos no solo es una estrategia inteligente, sino un paso crucial hacia un futuro logístico más eficiente y rentable. Quien no afronte este nuevo reto de forma inmediata, estará perdiendo una ocasión inmejorable para poder cambiar el rumbo de sus operaciones.
Carlos Zubialde
contacto@informacionlogistica.com
