El crecimiento exponencial que ha experimentado el sector del E-commerce en España ha traído aparejada una importante consecuencia, la necesidad de incorporar con urgencia a las plantillas de las empresas de logística a profesionales cualificados que ayuden a consolidar e impulsar un negocio en alza.
Los datos del empleo en nuestro país publicados por el Gobierno confirman esta tendencia, impulsada por la reforma laboral aprobada in extremis en el Congreso de los Diputados, con un incremento de afiliaciones a la Seguridad Social en el sector del transporte urgente de paquetería muy notable, en torno a un 5,4% en el mes de abril.
Profesionales cada vez más cualificados
Es cierto que no todos los trabajadores de las distintas escalas profesionales del sector precisan la misma preparación, no es lo mismo que una empresa demande un experto en Programmable Logic Control (PLC), que exige una alta cualificación, que un jefe de almacén, que requiere unas características menos técnicas.
Sin embargo, todo parece indicar que nuestro sector necesitará en un futuro contar con profesionales cada vez más cualificados, pues las exigencias del mercado y la propia evolución de las empresas de logística caminan hacia un sector muy especializado y definido por el uso de las tecnologías más avanzadas: robótica, big data, etc.; junto al desarrollo de las disciplinas tradicionales como estrategias de marketing, diseño, planificación, etc.
Hacia una logística integral y sostenible
Los principales desafíos a los que se enfrenta el sector del transporte urgente de paquetería se resumen en el objetivo de crear plataformas de logística que ofrezcan un servicio integral a las empresas de comercio online, optimizando los costes derivados de la distribución y minimizando el impacto que este tiene en materia medioambiental.
Efectivamente, un buen ejemplo sería el caso de una plataforma logística como AWIPIK, que actúa como aglutinador de las necesidades de un conjunto de empresas, que evitan así llevar a cabo gastos innecesarios en aspectos como almacenaje, clasificación o packaging, al tiempo que dispone de las herramientas necesarias para reducir la huella de carbono con el aprovechamiento al máximo de las cargas en los envíos o la utilización de vehículos no contaminantes en la entrega de última milla, así como otras ventajas adicionales como aminorar el impacto de la logística inversa.
Equilibrar costes y salarios
No es el motivo de este breve artículo el entrar a debatir sobre la precariedad laboral del sector o la situación de los falsos autónomos, toda vez que se detecta una tendencia a la baja de las afiliaciones al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, pero los responsables de las políticas de empleo deberían tomar nota y no olvidar que estos profesionales juegan un papel decisivo en este sector.
Los responsables de AWIPIK, a quien he puesto anteriormente como ejemplo, me han comentado en varias ocasiones que son conscientes de que se encuentran ante una situación compleja, en la que los costes se han disparado tras la subida del precio de los combustibles, y que necesitan profesionales cada vez más cualificados, sean personal de almacén, transportistas o informáticos, a los que quieren pagar de una forma justa y equilibrada, con incentivos que animen a consolidar el espíritu de equipo de la empresa y la voluntad de crecimiento personal.
Hacen bien. En mi opinión, no hay mejor receta para el éxito de una empresa de logística integral, que afronta grandes desafíos de futuro y una competencia extraordinaria, que una plantilla de trabajadores formados e ilusionados.
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