La carretera, el gran enemigo de los choferes de furgonetas: fallecen el doble que en el 2023
Que la carretera es peligrosa lo sabemos todos, y que los profesionales que devoran miles de kms sobre la misma tengan un mayor índice de posibilidad de sufrir un accidente, también es obvio. Pero pese a ello, que en el 2024 79 personas, conductores de furgonetas, perdieran su vida en la carretera,

Que la carretera es peligrosa lo sabemos todos, y que los profesionales que devoran miles de kms sobre la misma tengan un mayor índice de posibilidad de sufrir un accidente, también es obvio. Pero pese a ello, que en el 2024 79 personas, conductores de furgonetas, perdieran su vida en la carretera, ejerciendo su profesión, debe de llevar a una reflexión.
La cifra de los 79 fallecidos en accidentes de tráfico en vías interurbanas (no se cuentan las que han podido ocurrir en población) es el doble que en el 2023, cuando fueron 40 los fallecidos. Estos datos han sido aportados por el Ministerio del Interior junto con el resto de datos y tipología de vehículos.
Es un balance provisional, que toma como tal los fallecidos en vías interurbanas y que además, sean victimas registradas hasta las 24 horas posteriores a producirse el accidente, por lo que los fallecidos después de pasado ese tiempo, no son reflejados en esta estadística, pero que si serán incluidos en posteriores balances de siniestrabilidad, lo que permitirá poder tener una visión más global.
Siniestros en el transporte
Como se mencionaba, los fallecidos en furgonetas han sido 79 personas, casi el doble de las que ocurrieron en el 2023 (40 en total). Hay un dato muy significativo y es que 17 de estas personas, pese a ser conductores profesionales o acompañantes profesionales, no tenían abrochado el cinturón de seguridad. En cuanto a camiones, se ha reducido muy ligeramente, de los 37 fallecidos en el 2023 a 34 en el 2024.
Con estos datos en la mano, ciertamente se hace comprensible el control que se está llevando con las furgonetas en los últimos meses, no solo por la posible desidia en la cuestión del cinturón, sino también en otros puntos importantes como es la falta de un correcto mantenimiento de las mismas que reduce su seguridad, el exceso de peso o el control sobre los neumáticos y su correcto uso.
Detrás de las furgonetas se encuentra un sector muy expuesto a los cambios y presión de los precios, que en muchas ocasiones termina ejerciendo mayor presión sobre el último eslabón de la cadena como lo es la flota de distribución, sean autónomos o asalariados, que han de cumplir con unos muy exigentes turnos de trabajo y distribución.
Y es llamativo el caso de las furgonetas porque en el conjunto del resto de accidentes y fallecidos, las cifras se han incrementado muy ligeramente en el 2024, un 1% en los fallecidos y un 3% en los que han sufrido heridas graves con hospitalización. Es cierto que si se compara relativamente, pese al aumento, las cifras de desplazamientos interurbanos han aumentado en un 3.15%, lo que significa que la tasa de siniestros mortales por millón de desplazamientos ha sido de 2.2, la cifra más baja en la última década.
Es por todo eso que todavía duele más ver el importante aumento de víctimas que se da en las furgonetas, asociadas a las empresas de transporte más urgente y de distribución de última milla. Y la tipología de accidentes nos da también una muy buena pista, la salida de vía es la que más se registra, muchas veces fruto tanto de la velocidad como de las distracciones (móviles, llamadas, etc) o el cansancio directamente (largas jornadas, falta de horas de sueño etc).
En este barco no solo deben de estar las instituciones, el propio sector también debe de aumentar su implicación en este apartado, no hacerlo puede suponer vidas.