La nave Morning Midas se hunde en el Pacífico tras un incendio por baterías de ion-litio y daños estructurales
Un incendio en la carga de baterías de ion-litio llevó al hundimiento de la nave Morning Midas en aguas internacionales del Pacífico.

La nave portacoches Morning Midas, gestionada por Zodiac Maritime y con bandera liberiana, se hundió en aguas internacionales del Pacífico Norte el 23 de junio de 2025 tras semanas de esfuerzos fallidos por controlar un incendio iniciado el 3 de junio. La embarcación, que zarpó desde Yantai, China, rumbo a Lázaro Cárdenas, México, con una carga de más de 3.000 vehículos —incluyendo eléctricos e híbridos— y cientos de toneladas de diésel y aceite combustible, sufrió daños estructurales graves a causa del fuego.
El incendio se detectó inicialmente en uno de los puentes de la nave donde se almacenaban los vehículos eléctricos, causado por baterías de ion-litio, conocidas por ser particularmente difíciles de extinguir. A pesar de que el equipo a bordo activó los sistemas de extinción, el fuego persistió y se extendió, obligando a toda la tripulación de 22 personas a evacuar con éxito, sin resultar heridas. Desde entonces, la Morning Midas quedó a la deriva, en llamas, en medio del océano Pacífico, a unos 360 millas náuticas de tierra firme, en condiciones meteorológicas adversas con vientos fuertes y olas de aproximadamente 1,8 m.
Numerosos esfuerzos de salvamento se llevaron a cabo, incluyendo la llegada de los remolcadores Gretchen Dunlap y Garth Foss, que partieron desde lugares remotos para llegar a la nave en estado de semi-control. Las operaciones incluyeron la estabilización mediante cables de remolque y evaluaciones del riesgo de incendio por parte de especialistas a bordo de estos remolcadores. Sin embargo, el daño estructural fue tan severo que la nave no pudo ser remolcada hacia puerto, en parte debido a la profundidad del mar —5.000 m—, lo que dificultó las operaciones de recuperación.
Las condiciones meteorológicas también jugaron un papel fundamental en el empeoramiento de la situación, con vientos cortantes de hasta 50 nudos que complicaron aún más la posibilidad de controlar el incendio y evitar el desplazamiento de la nave, lo que contribuyó a su eventual hundimiento. La Morning Midas se convirtió en uno de los numerosos incidentes de este tipo en la última década, en la que al menos trece graves incendios en barcos portacoches han provocado varios hundimientos y pérdidas totales, además de varias muertes, incluyendo tripulación y personal portuario.
Este incidente resalta los peligros asociados al transporte marítimo de vehículos, especialmente los que contienen baterías de ion-litio, y subraya la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y los protocolos en la lucha contra incendios en este tipo de embarcaciones. La tragedia de la Morning Midas se suma a un preocupante historial de accidentes marítimos con carga de vehículos, recordando el caso del Felicity Ace en 2022, que también sufrió un incendio y terminó hundiéndose en el Atlántico con una carga valiosa.